Una pareja italiana busca ayuda legal para impulsar una demanda contra su descendiente, quien reclama que le laven y planchen la ropa y que le preparen la comida
Como en la película francesa Tanguy, de Étienne Chatiliez (2001), una pareja no sabe como deshacerse de su hijo, ya grande para estar en casa. Claro que el personaje de la vida real no es tan agradable como el interpretado por Eric Berger en el film.
En declaraciones a medios italianos, vecinos de la familia residente de la ciudad de Venecia, describen al joven en cuestión como temperamental, desagradable y agresivo. Además, manifestan que le hace la vida imposible a sus padres, quienes decidieron recurrir al asesoramiento de abogados en la asociación de consumidores Adico.
La abogada Andrea Camp dijo que se envió una carta al hijo en la que se le pide que deje el hogar en seis días o, de lo contrario, deberá afrontar acciones legales.
En caso de negarse, los abogados le pedirán a una corte en Venecia que emita una orden cautelar para los padres maltratados en contra de su hijo.
"No podemos hacerlo más. Mi esposa sufre de estrés y tuvo que ser hospitalizada. (Mi hijo) tiene un buen trabajo pero todavía vive en el hogar", contó el padre a medios locales. "Insiste en que sus ropas sean lavadas y planchadas y que sus comidas sean preparadas. De verdad no tiene intenciones de irse", agregó
Adico sostuvo que cientos de familias italianas enfrentan problemas similares para hacer que los hijos adultos se vayan de la casa. Toda una definición cultural, que del otro lado del Atlántico cada vez tiene menos apoyo.
En declaraciones a medios italianos, vecinos de la familia residente de la ciudad de Venecia, describen al joven en cuestión como temperamental, desagradable y agresivo. Además, manifestan que le hace la vida imposible a sus padres, quienes decidieron recurrir al asesoramiento de abogados en la asociación de consumidores Adico.
La abogada Andrea Camp dijo que se envió una carta al hijo en la que se le pide que deje el hogar en seis días o, de lo contrario, deberá afrontar acciones legales.
En caso de negarse, los abogados le pedirán a una corte en Venecia que emita una orden cautelar para los padres maltratados en contra de su hijo.
"No podemos hacerlo más. Mi esposa sufre de estrés y tuvo que ser hospitalizada. (Mi hijo) tiene un buen trabajo pero todavía vive en el hogar", contó el padre a medios locales. "Insiste en que sus ropas sean lavadas y planchadas y que sus comidas sean preparadas. De verdad no tiene intenciones de irse", agregó
Adico sostuvo que cientos de familias italianas enfrentan problemas similares para hacer que los hijos adultos se vayan de la casa. Toda una definición cultural, que del otro lado del Atlántico cada vez tiene menos apoyo.
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